La política es una herramienta para construir futuro. Mientras más conoces tu tierra y tu gente, más lejos podemos llegar en materia de transformación positiva, es decir, mejorar la vida y las condiciones que rodean el día a día de la ciudadanía.
Desde los espacios que ocupamos, nuestros equipos de trabajo hacen todo lo posible para, además de mirar a lo lejos, hacer de lo inmediato, de lo real, de lo tangible, una suma de hechos concretos que cohesionen, aúnen y construyan identidad de provincia, conciencia municipal y valores reconocibles que favorezcan el progreso y la convivencia.
La provincia de Cáceres es, me atrevo a asegurarlo, un ejemplo de crecimiento tranquilo, seguro y convencido de convertirse en vanguardia nacional sin enfrentarse a ningún otro territorio, sin victimizarse, sin arrodillarse y sin apropiarse de nada que no nos corresponda.
Unir y avanzar, mostrarnos en el mundo para que el mundo disfrute de lo que tenemos y sabemos hacer, es el objetivo principal de las administraciones en las que asumimos la responsabilidad de elegir un camino y de transitarlo con la solvencia que los tiempos requieren.
Nuestras potencialidades son enormes y nuestra hoja de ruta está marcada por un profundo conocimiento de nuestros pueblos y ciudades.
No hace falta enumerar hechos, porque nuestras políticas son visibles y reconocibles allí donde las implantamos.
Reconocernos en nuestras tradiciones para encontrarnos en el futuro es, qué duda cabe, el reto que planteamos desde los diferentes matices que componen nuestra riqueza territorial.
Unir y avanzar, mostrarnos en el mundo para que el mundo disfrute de lo que tenemos y sabemos hacer, es el objetivo principal de las administraciones en las que asumimos la responsabilidad de elegir un camino y de transitarlo con la solvencia que los tiempos requieren.
Progreso y riqueza dentro de un marco de igualdad, son los valores que sostienen cada decisión que tomamos, cada ayuda que lanzamos y cada política que activamos, repito, desde la realidad para, como decía un político sudamericano, conseguir lo imposible.
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